lunes, 22 de marzo de 2010

Mas sobre el Guernica.

La semana pasada se saldó con mucho ruido mediatico la disputa entre el Museo del Prado y el Museo Reina Sofia por la posesiòn del Guernica de Pablo Picasso. El martes(15.03.10) se reunió, con la presencia de la ministra de cultura, el patronato del Reina y emitió un comunicado muy contundente afirmando que el Guernica se queda donde está. O sea, en la segunda planta del edificio Sabattini de dicho museo, rodeado por un nutrido conjunto de pinturas, esculturas, grabados, dibujos, fotografias y peliculas compuestas en torno a la Guerra Civil española, de cuyos horrores el cuadro de Picasso es la alegoría mas universalmente admitida.

Pero, como si quisiera socavar de alguna manera el aplomo y la confianza en sí mismos de los miembros del patronato del Reina, la revista brumaria puso hace poco en circulación un número doble, dedicado al activismo politico de los años 60/70 del siglo pasado en los medios artísticos neoyorquinos, del cual The Art Worker´s Coalition fue una expresion singularmente representativa. En ese número es posible leer la carta abierta que cerca de dos centenares de artistas, escritores e intelectuales le dirigieron el 11 de marzo de 1970 a Pablo Picasso, pidiéndole que retirase el Guernica del MoMa, porque ¨ The continuous housing of Guernica in the Museum of Modern Art, New York, implies that our establishment has the moral right to be indignant about the crimes of others -- and ignore our own crimes¨. En el encabezamiento de esa carta abierta se puede leer: ¨ Dear Pablo Picasso, When the Franco Government of Spain recently invited to you to return and to bring Guermica to Madrid, you say no: only when Spain is again a democratic republic will Guernica hang in the Prado. ¨ Entre los firmantes de esa carta figuran los nombres de Richard Avedon, Gregory Battcock, Carleton Beals, Louise Bourgeois, Leon Golub,Dick Higgins, Donald Judd, Alex Katz, Joseph Kossuth, Les Levine, Lucy R. Lippard, Norman Mailer, Robert Mangold, Herbert Marcuse, Barbara Rose, Robert Smithson y Nancy Spero.

Instantáneas de BCN

Viajé a Barcelona el miercoles pasado(17.03.10) y ese mismo dia vi en el Centro Santa Mónica Antartida.Tiempo de cambio, la exposicion de Mireya Masó curada por Alicia Chillida, que es una meditación sobre el tiempo inducida y mediada por la estancia de su autora en una base naval argentina en la Antártida. En las fotografias y sobre todo en los videos las imagenes de las nieves y los hielos perpétuos ofrecen una experiencia de intemporalidad que se resuelve en sosiego. Como si el desierto blanco fuera paradójicamente el único locus amaenus que nos resta en esta sociedad nuestra proyectada a una velocidad de vertigo hacia ninguna parte.

En la tarde fui a la Fundacion Tapies con ganas de ver con mis propios ojos la ampliacion y reforma de la misma, obra de Abalos + Sienkiewicz - dos arquitectos amigos - que en esta oportundidad han dado muestra una vez mas de con cuanta soltura y elegancia manejan los códigos racionalistas. Su intervencion en la parte antigua de la Fundación, que fue sede de la editorial Domenech, es un prodigio de discrecion y eficacia. Y es igualmente virtuosa la forma como resolvieron, en clave de jardin zen, la terraza que corona el blanco edificio de acero y cristal de la ampliación y en donde está instalado el Matjo, el polémico ¨calcetín ¨ diseñado tiempo atras por Tapies como un monumento urbano. Pero no es esta la única presencia del trabajo del gran maestro catalán en el marco de la reinauguracion de la fundación que le ha sido consagrada. En la principal sala de exposiciones hay una muestra de su trabajo verdaderamente extraordinaria. Tapies es un artista del que me alejo - a veces por largas temporadas - pero al cual regreso inevitablemente sólo para quedar una vez deslumbrado por la muy estimulante potencia y variedad de su arte.
Al dia siguiente, otros dos encuentros felices. El primero con Rodney Graham, de quien el Macba expone actualmente una gran retrospectiva que me ha permitido darme cuenta de cuán elaborado formal y conceptualmente es su trabajo. Y de cuan culto y reflexivo es él propio Graham. De él llevo ya muchos años viendo obras suyas en los mas diversos escenarios: en Nueva York, en Venecia, en Londres, en Milán... Pero nunca antes habia tenido la oportunidad de verlo y juzgarlo en conjunto, como si lo he hecho en esta oportunidad en el Macba. Hay tambien en el museo catalán un retrospectiva de John Baldessari que cumple igualmente su papel de ofrecer una panorámica muy completa de la obra de una artista El único problema es que esa obra me interesa y estimula mucho menos de lo que hace la obra de Graham.
El siguiente encuentro fue con Luis Gordillo o, mejor aún, con una de esas caústicas travesuras suyas, que todos le permitimos dada su condicion de maestro sabio y definitivamente consagrado. En esta oportunidad es Caixaforum la que se la ha permitido, con su invitacion a que revisara de arriba a abajo su coleccion de arte contemporanea con el fin de componer con entera libertad una muestra de la misma. Y libertad es precisamente lo que se ha permitido Gordillo con la exposición en la que ha dado por concluido su singular trabajo de curaduria. El titulo ya anticipa su desparpajo: Cosmetica dogmática. Y en el contenido de la misma hay muchas asociaciones entre las obras expuestas audaces, insólitas e inclusive despiadadas. Como esa de reunir en una misma sala esculturas metalicas de Ángeles Marco, Sergi Aguilar, Txomin Badiola, Maribel Domenech, Pello Irazu y Natividad Navalon, que se asemejan tanto entre si que parecen obras de un sólo artista. ! Un golpe de gracia ¡

domingo, 21 de marzo de 2010

En tierra hostil, de Kathryn Bigelow

Desde la Ilíada por lo menos, la guerra es inseparable de su leyenda. Pero esta antiquísima relación ha adquirido un alcance y papel muy singular en el contexto de la War on terrorism decretada por el presidente George W. Bush. Esta guerra mas que una guerra en el sentido clásico - con sus protagonistas, sus escenarios, sus objetivos y sus tiempos claramente diferenciados - es un estado de guerra ubicuo y omnicomprensivo, en el que la paz se mezcla promiscuamente con las acciones bélicas y en la que las motivaciones y los objetivos admitidos públicamente por los estrategas de Washington son tan fantasmales y difusos que nadie sabe a ciencia cierta como ni cuando va terminar. Si es que termina algún día, si no es que por su propia naturaleza incorpórea esta guerra es interminable o propiamiamente infinita, tal y como lo anticiparon sin miramientos quienes la pusieron en marcha. De allí que la ubicación de su leyenda haya cambiado con respecto a los modelos clásicos y que la misma en vez de producirse después, cuando la guerra ha concluido, y obedeciendo al deseo de recordarla y perpetuarla en la memoria colectiva, se produce simultáneamente con el desarrollo mismo de la guerra, como un modo de interpretarla y de actuar sobre la conciencia que se tiene de ella que contribuye notablemente a alimentarla y a prolongarla. La película En tierra hostil de Kathryn Bigelow conecta con esa leyenda aunque lo hace de una manera en la que bien vale volver una y otra vez. Y no porque le hayan premiado con tantos Oscar, aparente o realmente imprevistos. No, lo que en realidad me interesa de esta película es el verismo barroco - caravaggiano para ser precisos - con el que interpreta o se versiona la leyenda de la Guerra contra el terrorismo. La estructura o la matriz de esta leyenda es evidentemente maniquea porque en ella el Bien y el Mal protagonizan un duelo a muerte, a rajatabla y sin contemplaciones, que toda persona de bien sólo puede desear que se salde al final con la diáfana victoria del Bien sobre el Mal, esas abstracciones supremas. Bigelow parece haber advertido, sin embargo, que las abstracciones que rigen este singular juego alegórico suponen un obstáculo para la comprensión y la fluida aceptación masiva del mismo, en una sociedad como la americana en la que todavia pesa el empirismo que se complace en los hechos tal y cual son y sospecha o por lo menos duda seriamente de las abstracciones y las generalizaciones. ¿Cómo se puede entonces ser convincentemente maniqueo en ese contexto? Pues aprendiendo voluntaria o involuntariamente de Caravaggio y el caravaggismo y apostando, en consecuencia, por una representación antrópica e hiperrealista de aquello que, en la leyenda subyacente que enmarca y otorga sentido a esa representación, no son mas que abstracciones. De allí que el tema del Terrorismo - así con mayúsculas, abstracto o idealizado por la tachadura de las múltiples determinaciones que lo hacen concreto – se transforma por obra del arte de Bigelow en un duelo corporal, tangible, inmediato entre una patrulla de zapadores de las tropas de ocupación americanas en Bagdad y las diversas clases de bombas con las que los fantasmales resistentes iraquíes intentan una y otra vez aterrorizar tanto a la patrulla como a una multitud de nativos aparentemente ajenos a los propósitos de los insurgentes. La cámara se acerca tanto y tan minuciosamente a la desactivación de cada una de las bombas y se inmiscuye tan obscenamente en la cotidianeidad más bien miserable de esos soldados que el espectador fascinado termina convencido – o sea, vencido por sí mismo - de que la guerra en Irak se libra por los inapelables motivos dictados por su leyenda. Pero eso no es todo. El verismo barroco de Bigelow culmina en representación del héroe de película que elige y promueve y que no es un soldado que va a la guerra por algún motivo concreto, así sea el de la pura supervivencia en una sociedad tan despiadada con el looser como es la americana - tal y como le sucede al resto de los miembros de la patrulla. No, este hombre va a la guerra primero y regresa a ella despues - desdeñando la seguridad y el confort de la vida petit bourgoise del suburbio que le ofrecen su hogar y su familia - porque ama la guerra. Porque ama enfrentarse al peligro y exponerse a la muerte. A este guerrero ejemplar, paradigmático, carne él mismo de la abstracción alegórica, le sobran por lo tanto las razones con las que la leyenda suele justificar la guerra ante el resto de los mortales. Él es un ¨ amante de la muerte ¨ - como reza el lema de la Legión española - que se enrola voluntariamente en el sangriento conflicto de Irak porque asi puede arriesgar diariamente la vida con una temeridad suicida. Y su amor por la guerra por la guerra misma resulta perturbadoramente congruente la tautologia implícita en una guerra contra el terrorismo librada con metodos terroristas.

sábado, 20 de marzo de 2010

Al final de una era, según Muñoz Molina.

El novelista Antonio Muñoz Molina publicó en babelia (06.03.10) un comentario sobre End of an Era, la mas reciente exposicion de Damian Hirst en la galeria Gagosian de Nueva York. El comentario era especialmente ácido y dio lugar, entre otras cosas, al breve intercambio e mail entre la artista Marisa González, actualmente residente en Londres, y yo, que tuvo como corolario el comentario de una amiga suya, adscrita a la embajada española en la capital británica. Estos son sus términos:

Querido Carlos: Ahora, sábado después del lunch, un precioso día soleado de Londres, en el salón con mucho sol y buena música, abro el diario El País y enseguida Babelia. En cuanto he leído el artículo de Muñoz Molina "Al final de una era," me he acordado de ti y me dieron ganas de comentarlo. Ya hemos hablado algunas veces sobre este autor que, como Vicente Verdú, Manuel Vicent, Javier Marías etcétera, todos creadores de opinión y todos en contra del arte contemporáneo. Pero este artículo de Muñoz Molina está muy bien. Quien compra el arte tan caro? Los especuladores y banqueros que nos están llevando a la ruina. ¿Por qué vale más una obra que otra? Por el sello, el marchamo que la avala, la marca, la firma. Los demás vamos de comparsa, pero eso si la comparsa tiene que ser buena. Siempre hemos dicho que en ARCO se benefician solo unos pocos, los de la primera fila del desfile, del ballet, pero todos los demás, la comparsa, lo tenemos que hacer muy bien si queremos estar. No somos los bailarines figuras del ballet, ni los cantantes solistas, somos el coro, pero estamos en el ballet nacional, en el coro del Real, de comparsa. Al final el arte es un producto especulativo y mediático manejado por cuatro poderosos y algún artista financiero y especulador ¡Que pena ¡
Espero que comentes el artículo de Muñoz Molina en tu blog porque tu opinión me interesa.
Un gran abrazo.
Marisa


Marisa querida: el articulo de Muñoz Molina está bien pero se pasa un poco, porque pone exclusivamente su mirada en el mismo lugar donde lo ponen los focos de los media. O sea en aquel arte espectacular vinculado a los precios exorbitantes y a los artistas más glamorosos, que si alcanza tanta resonancia a escala social es debido justamente a la excesiva atención que le prestan dichos media. Pero como sabemos bien tú y yo el arte es más que ese arte y no me refiero sólo a los artistas marginados o automarginados que desdeñan la esfera pública y optan por un voluntario exilio en los confines de la sociedad. Me refiero, en realidad, a esos artistas que exponen en galerías, museos, centros de arte, bienales y documentas y cuya obra solo merece la atención de los media - y por ende de los especuladores y de los millonarios ansiosos de fama - cuando protagonizan un escándalo o baten un anterior record de los precios. ¿Conocerá Muñoz Molina a Tony Cragg, Gerhardt Richter, Shirin Neshat, Susana Solano, Rodney Graham, León Ferrari u Oscar Muñoz, para mencionar de entre todos los artistas actuales los que se me vienen ahora de un golpe a la cabeza? Y si los conoce ¿porqué los deja fuera? ¿Por qué expone, en términos que resultan absolutos, unas reflexiones sobre la situación actual del arte contemporáneo que deja fuera lo que es y lo que importa su obra? ¿O es acaso él también quiere audiencia y resonancia mediática denunciando los excesos del mercado del arte precisamente ahora, cuando somos tantos los que estamos indignados con los catastróficos excesos en los que han incurrido impunemente los dueños de las finanzas del mundo? En fin, repito, el arte es más que el que promueven los media y triunfa en las subastas. Y por lo mismo, los que estamos vitalmente comprometidos con él, somos más que simples comparsas de las prima donas. En el mundo del arte - como en los restantes mundos que componen nuestro mundo - todos somos necesarios aunque ninguno de nosotros sea imprescindible.
Abrazos.


Hola Marisa.

Estoy de acuerdo en lo que dice tu amigo Carlos Jiménez, pero creo que el que haya otro tipo de artistas y de arte no contradice lo que Molina decía en su artículo. Yo creo que él criticaba ese arte tan mercantilista y mediático y los precios desorbitados que alcanza, pero no insinuaba que fuera el único arte que existe.

Saludos

martes, 9 de marzo de 2010

Shirin Neshat en el Reina Sofia.

Women without Men es el titulo de la primera pelicula que ha realizado Shirin Neshat, la artista iraní reconocida internacionalmente por su notable trabajo videoartístico. Y la presentó personalmente en Madrid, el 3 de marzo pasado, en el auditorio Sabatini del Museo Reina Sofia, ante un público devoto que colmaba literalmente la sala y que aplaudió con entusiasmo tanto sus palabras como la propia película. Ella es morena, delgada, frágil y de unos enormes ojos negros que esa noche acentuaban la íntima conviccion que transmitian sus palabras. Habló de su arte, de su pelicula, de la novela en la que se ha inspirado y de las razones por las que se decidió a hacer cine despues de tanta dedicación al video arte. Tambien tuvo palabras para condenar la detención el día anterior en Teherán de cineasta Jafar Panahi, que en el 2000 obtuvo el León de Oro del Festival Internacional de Cine de Venecia, con el film The Circle. Y asimismo palabras para agradecer a Shoja Azari, su pareja, su apoyo y su extraordinaria ayuda en la realizacion de esta pelicula. ¨ Shoja hacia cine mientras yo hacia video, ahora yo hago cine y él está haciendo video¨, comentó risueña.
La película, que tiene su antecedente directo en un video instalación poliédrica de la propia Neshat, se centra en las historias de cinco mujeres iraníes a las que la crisis y la agitación politica subsiguiente causadas por la decision de 1953 de Mossadegh, el primer ministro irani de entonces, de nacionalizar el petróleo, afectando seriamente los intereses de las multinacionales petrolíferas anglosajones. La turbulencia que en esos dias sacude a Teherán junta a unas mujeres que por sus disimiles condiciones sociales no tendrian que haber cruzado jamás sus caminos. Y a cuyas vidas y experiencias Shirin Neshat se acerca con una mirada amorosa que, como la de Felini o de Garcia Márquez, ni juzga ni condena, ni idealiza ni exalta sino que simplemente se complace en lo que estas mujeres son y lo que hacen o intentan hacer venciendo las ubicuas resistencias de una sociedad dominada por la cultura patriarcal. Como tantas. Como la mayoria. Shirin Neshat declaró también esa noche que dedicaba su pelicula a todos los que han luchado por la libertad en Irán desde las luchas por una constitucion democrática de comienzos del siglo XX hasta las que hoy lo siguen adelantado. Y bien que sirve a esos incontables luchadores anónimos una película en la que mujeres igualmente anónimas intentan convertirse en las protagonistas de sus propias vidas, rehuyendo con fuerza el papel de comparsas de un autosacramental dominado por el omnipresente maniqueísmo contemporáneo.

martes, 2 de marzo de 2010

Tania Bruguera ataca de nuevo.


Frónesis es el titulo elegido por Tania Bruguera para la exposición que inauguró la semana pasada (25.01.10) en la galeria Juana de Aizpuru de Madrid, con una de esas performances suyas, en las que ella fuerza a los espectadores a someterse a experiencias conflictivas. El año pasado las situaciones que ella forzó en la bienal de La Habana y en festival internacional de perfomance en Bogotá tuvieron una evidente connotación política, que tambien lo tuvo en mi caso, porque accedi a la invitacion que me hizo - inmediatamente despues de entrar en la galería - a tatuarme donde quisiera ¨ una consigna revolucionaria¨. Yo , en principio, lo tomé a la ligera, hasta el punto de bromear con la posibilidad de que esa consigna fuese ¨ Patria o muerte ! Venceremos¡ ¨ que por su sola longitud supone una notable prolongación del daño que el tatuaje infringe a la piel. Pero Tania insistió, le respondi que a duras penas me tatuaria la palabra Cuba, ella me replicó que no era suficiente y yo le dije que entonces me tatuaría Soy Cuba, que es el titulo de la exraordinaria película de Mijail Kalatazov, con fotografia de Sergei Urusevsky, guión del poeta Yuri Yevtuchenko y dedicada a la revolución cubana. Y que, sin embargo, no gustó ni en Moscú ni en La Habana, aunque por razones muy distintas. El tatuaje sobre el biceps de mi brazo izquierdo y realizado por un tatuador profesional contratado por Tania, duró unos 50 minutos y no me dejará mas que unas cicatrices que tal vez no duren mas de un año porque el tatuaje fue realizado sin emplear la tinta que lo convierte en indeleble. ¨Al fin y al cabo - pensé - no me hecho jamás un tatuaje en la vida y Tania me está ofreciendo un buen pretexto para hacerlo.

Habría que añadir que el titulo de la expo de Tania Bruguera inaugurada de este modo, remite tanto a Aristóteles como al novelista cubano José Lezama Lima. Para el autor de Ética a Nicómaco, la frónesis es esa comprension de las disyuntivas éticas que plantea la vida guida por la prudencia y que por lo tanto sabe distinguir y adoptar el ´ justo medio´, que en el caso del coraje se sitúa entre la temeridad y la cobardía. Y para Lezama Lima, es uno de los tres personajes centrales de su gran novela Paradiso, sobre cuyo caracter alegórico el crítico cubano Granados Herrera ha escrito lo siguiente: ¨por lo que la realidad ( Cemí), resultaria de sustraerle al arquetipo de la plenitud ( Frónesis ) la dificultad de su realización (Foción)¨. La cuestion es que la muestra de Tania es cualquier cosa menos prudente. O plena. De hecho consiste en el despliegue en los blancos muros de la galeria que la alberga del cronograma de las acciones ilegales , o por lo menos alegales, que Tania pretende realizar en los próximos seis meses en otros tantos espacios museísticos del planeta. El primero de la lista es el Museo Reina Sofía, donde ella tomó con la cámara de su teléfono móvil una secuencia de fotografía, con la misma intención - según sus propias palabras - con la que un asaltante fotografía el interior del banco que piensa asaltar. Y en donde ya realizó dos acciones situadas entre la ilegalidad y la alegalidad: chorrear con pintura y de arriba a abajo la esplendida escalera de servicios del edificio Sabattini de dicho museo y lamer la escultura de Richard Serra Guernica/ Bengazzi.