viernes, 2 de mayo de 2014

La imaginación política radical.



La exposición se titula escuetamente Playgrounds y es de una heterogeneidad fascinante, que junta sin traumas a Goya con Oliver Ressler y Archigram con Reclaim the Streets, para citar solo a dos de sus múltiples extremos. Cada obra expuesta vale entonces por sí misma y cada una invoca su propia constelación  de obras simpáticas o simplemente afines. Pero ninguna se suma sin más a la siguiente ni se presta con facilidad a componer un cuadro coherente o a incorporarse sin trámite a un discurso homogenizador  y omnicomprensivo por mucho que ¨ playgrounds¨  se proponga a la vez como contraseña y consigna. Podría hablarse incluso de  surrealismo y de la aplicación daliniana de la asociación libre sino fuera porque apenas hay nada de onírico en el tono o el estilo del conjunto de las obras expuestas. O si lo hay pertenece al ámbito de los sueños despiertos o de esas ensoñaciones mediante las cuales, según Walter Benjamin, la humanidad anticipa su futuro. El sueño de una humanidad liberada del mismo régimen de esclavitud asalariada que históricamente la acuñó como concepto y como percepto. Y cuya posibilidad de realización hoy parece más comprometida que nunca. Al punto que  la humanidad  se empeña en apartar de sí, como si fuera un mal sueño, cualquier imagen de emancipación radical, tal vez porque ha llegado a intuir que esa renuncia es el precio que debe pagar si quiere que se la siga  tratando como a humanidad.
Pero sea la que sea la interpretación que aquí demos de lo onírico y concedamos la importancia que queramos conceder al papel de los ¨ terrenos del juego ¨ en el discurrir de esta exposición, lo cierto es que el propósito de la misma también puede ser leído o apropiado como un formidable intento de  alimentar y estimular, por la vía de la asociación libre, a ¨ la imaginación política radical ¨. Un concepto esclarecedor donde los haya, que si no es de Marcelo Expósito bien que merece ser suyo, por lo mucho que él se ha esforzado desde hace años en divulgarlo y en llevarlo a cabo entre nosotros. Y entre los otros. De hecho, los dos vídeos suyos que se proyectan en una pequeña sala situada al inicio del recorrido de esta gran muestra, ofrecen una buena explicación de lo que es para él la imaginación política radical. Y de la que el legendario carnaval realizado en la City de Londres, por instigación del colectivo Reclaim the streets, es un excelente ejemplo. En esa acción estuvieron involucrados los componentes claves  de lo que Expósito entiende por política: la acción directa y no delegada ni diferida, el desencadenamiento entre todos de la imaginación, la toma festiva o lúdica de las calles, la subversión o la inversión paródica de las jerarquías sociales y políticas, el impulso utópico… A estas señas de identidad habría que añadir la redefinición del sujeto político radical, que ya no es más ni la clase social ni los partidos y sindicatos de clase – como en la tradición marxista – sino la multitud, en el sentido redefinido virtuosamente por Toni Negri y Michael Hardt. Y todavía más, la que yo califiqué alguna vez de  ¨multitud en red ¨ para subrayar el papel crucial del Internet en la constitución y el despliegue de las multitudes contemporáneas. Y desde luego en la toma insubordinada de las calles y de las plazas por esas mismas multitudes, que es uno de los rasgos característicos de la política contemporánea a escala planetaria, por lo menos desde que el nuevo milenio se iniciara con las movilizaciones antiglobalización convocadas en contra de las cumbres del G-8. Las citas en las alturas olímpicas de los países que se empeñan en decidir por nosotros sin contar con nosotros.  

Sólo que ahora se ha roto la relación inequívoca entre la ocupación de las plazas y las calles y la política radical. Como demuestra desgraciadamente el ejemplo que está ofreciendo la crisis ucraniana, las ocupaciones multitudinarias, manipuladas mediáticamente, pueden terminar satisfaciendo los planes estratégicos tanto del Imperio Americano como de unos adversarios suyos igualmente imperiales.     


Playgrounds. Reiventar la plaza. Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía. Madrid. Mayo- Julio, 2014.