miércoles, 15 de abril de 2009

Jose Bedia en Granada.

Jose Bedia es un artista extraordinariamente fiel a si mismo que tiene, además, la rara habilidad de conseguir que su obra no parezca nunca repititiva o redundante. Como sí le ocurre, por ejemplo, a Fernando Botero, cuya notable destreza de dibujante y pintor no logra impedir que terminemos diciendo que siempre pinta el mismo cuadro. Ante las obras de Bedia, por el contrario, está garantizada la impresion de estar viendolas por la primera vez, como si nunca antes hubieramos estado delante de esos dibujos y cuadros en el que las figuras de dioses, hombres y animales reducidas a unos perfiles trazados con una elegancia deslumbrante, dominan completamente la escena.
Pero Bedia tiene otra virtud que me seduce igualmente y que queda muy bien documentada en las piezas reunidas ´ Analogia mística ´, la exposición que tiene abierta actualmente en la galería Sandunga de Granada (10.04.09). Es la virtud de transformar su sabiduría - que es la sabiduria de las religiones afrocubanas - en potentes comentarios poéticos y con frecuencia irónicos de la situacion actual de los pueblos americanos. Y no solo la del pueblo cubano - al que están referidas en esta exposicion dos pinturas sobre papel dedicadas a Yemayá y Ogún - sino tambien a la propio pueblo estadounidense, cuyos gobernantes cargan sobre sus hombros el peso de financiar los aviones, los buques de guerra, los blindados, los misiles y los satelites con los que intentan mantener e incluso perfeccionar su control del mundo. En la pieza de Bedia que incluye la leyenda ´Dead manwalking ´y en la que se observa a una figura humana cargada con una inaudita montaña de esos artilugios bélicos queda en evidencia cuán abrumadora resulta esa carga para el ciudadano americano común y corriente.

1 comentario:

  1. Hola Carlos, he visto en la web del Reina que actúa la compañía de Merce Cunningham a principios de mayo y ayer leí la noticia en El País, sería fantástico si pudieras adelantarnos algo;) creo que somos muchas personas las que estamos impacientes por ver a la compañía de Cunningham. Muchas gracias!
    Berta

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